Cualquier noche de estas sé que vendrá el diablo
con su cesto de piropos
y manzanas
a advertirme:
si se acaba que no sea poco a poco.
pero creo que trata de confundirme.
de confundirnos.
porque lo único que él teme es lo que nos mantiene a nosotros con vida:
volver a vernos,
bajarnos las cremalleras,
incluida la del corsé
donde guardamos a presión las dudas.
y follárnoslas
como si no hiciéramos el amor.
con su cesto de piropos
y manzanas
a advertirme:
si se acaba que no sea poco a poco.
pero creo que trata de confundirme.
de confundirnos.
porque lo único que él teme es lo que nos mantiene a nosotros con vida:
volver a vernos,
bajarnos las cremalleras,
incluida la del corsé
donde guardamos a presión las dudas.
y follárnoslas
como si no hiciéramos el amor.
(Escandar, entre putos suspensivos)






No hay comentarios:
Publicar un comentario